Manolo García en Musicos en la Naturaleza

El cantautor catalán cerró anoche su gira en un concierto en la sierra de Gredos en el que se entregó con intensidad, talento y tablas, muchas tablas

Rozaban ya las dos y media de la madrugada, cuando en la sierra de Gredos, sobre el arbolado escenario de Músicos en la naturaleza, Manolo García se marcaba una ranchera con la que ponía fin a una gira que inició el 19 de febrero en Madrid y que solo ha contado con veinte conciertos. Ayer, en Hoyos del Espino, se congraciaba con sus seguidores castellanos y leoneses después de no incluir ninguna de las ciudades de esta comunidad en su tour musical. Pero sonaron los acordes de ‘Sigo siendo el rey’ y la ranchera, en el tiempo de descuento del concierto, en la profundidad de la fría noche abulense, sirvió de remate de una noche perfecta en la que el ex Los Rápidos, el ex Burros y el ex El Último de la Fila se entregó hasta la extenuación a un público que ya le adoraba.

No por ello Manolo fue menos Manolo, ni rebajó unos tonos la intensidad de su actuación al saber que jugaba en casa; cantó como se canta en el primer concierto de una vida musical, con el entusiasmo del que inicia una carrera con miedo e ilusión a partes iguales, pero con las tablas de un profesional que sabe reconocer lo que su público necesita y se lo entrega con pasión, talento y orgullo.

Al de Pueblo Nuevo, que el próximo 16 de agosto cumple 60 años, la edad tampoco le impidió lanzarse sobre sus fans en plena actuación, cantar entre sus seguidores dejando atrás el escenario o aparecer sobre la barra de los bares portátiles para demostrar que, después de 36 años de carrera, sigue siendo el rey.

Un monarca que reinó desde el minuto uno del concierto, cuando abrió el fuego con nuevas canciones de su último álbum ‘Todo es ahora’. ‘Caminaré’, ‘Es mejor sentir’, ‘Exprimir la vida’, ‘Volveremos a encontrarnos’ dieron paso a temas de sus anteriores álbumes como ‘Lo quiero todo’, ‘Un giro teatral’ o ‘Estoy alegre’, de ‘Los días intactos’ (2011), o ‘Prefiero el trapecio’, ‘Pájaros de barro’, ‘Zapatero’, ‘San Fernando’ o ‘Como quien da un refresco’, de ‘Arena en los bolsillos’ (1998).

Manolo García despide su gira en Gredos ante 7.500 personas

De El último de la fila solo sonaron dos: ‘Llanto de Pasión’ e ‘Insurrección’, como un regalo a las más de siete mil personas que seguían el concierto tras seis horas de música, con un frío helador y con un buen rollo contagioso que, seguramente, podrán atesorar durante años en los recuerdos que, como canta el de Pueblo Nuevo, todos guardamos en una caja de galletas.

Y con la ranchera, y agradeciendo el increíble trabajo de los músicos sobre el escenario y la entrega y el cariño del público, el cantautor despidió la noche mientras en el ambiente aún sonaba el recuerdo de «Todo es ahora, detrás no queda nada. Todo es ahora, cuando en las hogueras se baila. Todo es ahora, mientras se siga girando la noria».

Fuente: Liliana Martinez – Norte de Castilla – ENLACE