Manolo García: «Los políticos saben que el rock, con bozal y domesticado, es un arma útil»

Esta noche (ayer, 22 horas) presentará su nuevo trabajo ante el público ilicitano en La Rotonda, en uno de los conciertos más esperados del año

Geometría del rayo es el nombre del séptimo disco de Manolo García (Barcelona, 1955), desde que dio comienzo su carrera en solitario, tras dejar atrás El Último de la Fila.

¿Sigue manteniendo la ilusión de llegar a un lugar y ser el que anima la fiesta?
Sí, dentro de lo posible, porque los tiempos han cambiado mucho. El circuito de la música no tiene nada que ver con el de hace unos años. Las grandes bandas son las que hacen las capitales y se han puesto de moda los festivales de tres días en la playa. Sigo con mi idea de acudir a los lugares en los que se dan las condiciones para actuar.

Salvo el porcentaje que debe quedarse en taquilla, sus entradas para Elche se agotaron muy pronto, ¿nota que sigue contando con el favor del público?
Intento ganármelo gira a gira, nadie vive de las rentas. En cada concierto sudo la camiseta para estar a la altura. Si en la última gira dejas un buen recuerdo, lo más probable es que la gente vuelva. Tampoco debes abusar. Esto es un campo que tienes que dejar en barbecho, no puedes sacar cosecha cada año. Llevo tiempo tocando en suelo patrio y necesito cierta picardía. Es la historia de amor entre un músico y su público. Hay que jugar al enigma y al misterio para enamorar. http://preproduccion.manologarciaycia.com

En sus últimos discos reivindica la importancia del presente, ¿es lo que más le inquieta?
En nuestra forma actual de estar en el mundo hay una carga grande de ansiedad y de estrés. Arrastramos una mochila pesada del pasado a la vez que pretendemos lo que todavía no ha llegado. Tenemos la enfermedad de no tener la cabeza en el instante, la tenemos en meses más adelante. Hay que llevar un ritmo correcto, es una manera de gozar y disfrutar la vida. Lo contrario es un sinvivir, atropellarse a uno mismo. También me muevo en el presente porque sé que cada vez me queda menos en mi profesión. No es lo mismo que si tuviera 18 años y un solo disco.

Otra de sus grandes preocupaciones de siempre ha sido la de la salud del planeta…
Es una inquietud que he tenido constantemente. Desde mediados del siglo XIX empezó esto a torcerse. Vivimos una situación de progreso tecnológico e industrial desaforado. Estamos de espaldas a la naturaleza, esquilmándola. No es una inquietud puntual, una moda, siempre me ha parecido una monstruosidad lo que estamos haciendo. Llevamos décadas metiendo la pata y probablemente habremos pasado el punto de no retorno. Las campañas están muy bien, pero me dejan la sensación de que estamos intentando curar un cáncer con tiritas. Hay que operar, apuntar y sanear.

Su concierto forma parte del ciclo que Elche dedica a la Movida, ¿qué recuerda de aquello?
Fueron años de efervescencia creativa y de apertura. Ese nuevo mundo, del rock y cuatro peludos, estaba mal mirado. Luego el cuerpo político se dio cuenta de que era estupendo que la juventud estuviera distraída y no pensara en reivindicar nada o en ideas perniciosas para sus intereses. El rock, domesticado y con un buen bozal, estaba bien. De ahí vienen las historias del rollo mola y todos para adelante. Lo mejor es que surgieron muchas bandas que crearon obra. http://preproduccion.manologarciaycia.com

Luis García Montero dijo recientemente en estas páginas que, ante el auge de las redes sociales, se ve en la obligación de reivindicar las relaciones de carne y hueso, ¿lo comparte?
Absolutamente. Me interesa la vida en tres dimensiones y, si pudiera ser en cuatro o cinco, mejor. Las pantallas sólo sirven puntualmente. Pueden ser útiles en cierto momento y dar información o ayuda. Todo eso en su medida. Sigo amando la tinta y, cuando compro un libro, lo primero que hago es olerlo. Me gustan los discos físicos y que el dinero que pago vaya a parar a las editoriales y los autores, no a un señor que ha inventado un chirimbolo que vulnera las normas de venta.

Circula una afirmación suya en la que dice que rechaza las fotos con políticos, ¿es así?
Respeto a todo el mundo, aunque no me respeten a mí. Mucha gente que hemos perdido la fe en los políticos y hemos abandonado esa vía. No es que no quiera hacerme fotos con ellos, no soy maleducado ni le hago feos a nadie. Nos hemos llevado decepciones los que tenemos ganas de que todo vaya bien y hemos creído supuestas verdades. Al final, te alejas y sigues tu camino. Tampoco soy mejor que nadie e intento ajustarme a los protocolos de bonhomía.

Como barcelonés que es, ¿de qué manera ha visto la relación que han mantenido Cataluña y España los últimos tiempos?
Lo que tengo claro es que nada justifica la violencia. Cada uno puede tener sus ideas políticas pacíficamente. Vivimos en un país democrático en el que debe haber buena voluntad por hacerlo bien y no machacar a nadie. Con diálogo político se puede arreglar la situación. No será fácil porque los partidos se enconan demasiadas veces en sus intereses y les falta sentido común.

¿Ve el futuro con optimismo? http://preproduccion.manologarciaycia.com
En nuestras manos está intentar que el mundo vaya mejorando. No soy nadie para indicar caminos, lo único que puedo decir es que tenemos que estar despiertos, vivos y por la labor de aportar lo justo, lo correcto, lo necesario y lo mejor para todos.

Fuente: Diario Información – Borja Campoy